Estos compañeros que vemos en la foto, con la propaganda del gobierno justicialista en sus herramientas de trabajo, eran todo lo contrario a la imposición de la figura del "ser nacional". Eran laburantes de la tierra, que fueron dominados por la oligarquía terrateniente, los "dueños de las tierras y del país". Tierras adquiridas por las políticas de los Sarmiento, Mitre y llevadas a cabo in extremis por el genocida Roca. Tierras que todavía conservan la sangre de sus auténticos dueños, los pueblos originarios.
En consecuencia, los representantes del "ser nacional", los que sienten la "patria campera", los que, en definitiva, quieren volver a ese natural estado de cosas obtuvieron las tierras, que, por otra parte, fueron adquiridas por chirolas, a fuego y sable, exterminando pueblos y culturas, en pos del poder blanco, occidental y cristiano. Porque, según reza una de las primeras zonceras del manual del gran Jauretche,..."el problema de la Argentina es la extensión...".
Mientras todos estos descendientes de la rancia oligarquía, personeros bravucones y lenguaraces, esperan volver a los ideales del fundador de la Sociedad Reaccionaria Argentina, un tal José Martinez de Hoz (a próposito, el gerente de la Federación AgroSojera Argentina se olvidó que el histórico Grito de Alcorta se hizo para terminar con la explotación de los pequeños chacareros a manos de la SRA?), nosotros recordamos un gran lema de nuestro General Juan Perón:
"La tierra no es un bien de renta sino de trabajo; en consecuencia, la tierra debe ser del que la trabaja".
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