Forever Young.

Luego de la sanción de la esperada Ley de SCA, cada día que pasa, los golpes del Grupo Clarín siguen siendo tan fuertes como los que vienen tirando sin cesar desde la Resolución 125.
No tienen ningún asidero en la realidad, ya que toda bomba informativa está plagada de tergiversación de los hechos y una obscena decisión de seguir imponiendo agenda. Pero los golpes los siguen dando.
Y se enloquecen como el tiburón que advierte sangre a su alrededor.
Como antes fue la Gripe A, el dengue, el caos social, el fraude electoral (que mágicamente dejó de existir, ya que les fue bien a los candidatos del grupo) y otros tantos temas, desde la semana pasada el turno es de los movimientos sociales.
El año pasado fueron por D'Elía, hoy vuelven contra Pérsico y Milagros Sala, constructores de una verdadera red de contención social, después que los gobiernos afines a Magnetto y Noble hayan dejado un país incendiado, quebrado económicamente y con un 50% de argentinos en el desempleo y la pobreza.
A esta pelea al todo o nada elegida por el grupo, le sobran alcahuetes pagos que digan lo que el CEO necesite para seguir siendo "el presidente en las sombras".
Hoy presentamos al inefable periodista pago todo servicio (como lo denominan acá) Gerardo Young, autor de obras del máximo periodismo rentado, tales como "La Side" y "Negro sobre blanco", además de sus continuas operaciones a través del diario al cual le presta su servilismo.
En un nuevo intento por desprestigiar al Movimiento Túpac Amaru y a su máxima dirigenta, en la edición digital del día de hoy de Clarín nos escribe frases de una pluma exquisita, casi manierista, tales como:
"La Comandante K", "La Jefa del País Tupac" o este delicado fragmento: 2...¿Puede Milagro Sala, esa criatura frágil y agresiva, mal, manejar el destino de toda una provincia? Lo hace desde hace años, en buena medida gracias a la asistencia de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, pero también a su poder de conducción y a la ausencia de otros...."
Y esto es lo que escribió días antes de las últimas elecciones, planteando un escenario de fraude y clientelismo, que por supuesto no existió.

A partir de ahora vamos a seguir los pasos "informativos" de estos empleados a sueldo, capaces de decir cualquier cosa mientras le pasen el sobre o se "ganen" ascensos dentro de la empresa multinacional.